A OÍDOS DEL SEÑOR RECTOR DE LA UP

Yo soy uno de los miles y miles de panameños y miembros de la comunidad universitaria, que más alegría he experimentado con la llegada suya a la Rectoría de la Universidad de Panamá, porque acabó con la hegemonía corrupta y malévola de Gustavo García de Paredes en la colina o templo de perdición intelectual, que sólo contribuyó a la degradación académica de nuestro primer centro de estudios superiores, a base de persecución y tortura psicológica que eran de su conocimiento desde hacía mucho tiempo.

Usted es consciente de su propuesta de transformación integral, que motivó a la mayoría de los votantes, quienes le concedieron una licencia para actuar. Con todo ese poderío que le dieron, y encuentra los miles de desaciertos de Gustavo y no procede para eliminarlos, implica que está de acuerdo con ellos. Por ejemplo: Gustavo García de Paredes, por intermedio de Recursos Humanos me sometió a una evaluación psicotécnica de matemática bajo la potestad de evaluadoras que no sabían sumar y mucho menos las leyes de la suma y la multiplicación, (usted conoce el caso, y en su despacho está la copia de la carta que envié el Consejo Académico con todas las pruebas). Dichas evaluadoras resolvieron en el tablero las siguientes operaciones:

1.       ¿Cuál de las siguientes fracciones es diferente de las otras dos: 3/7, 3/9 y 3/11?

Yo les dije a las evaluadoras que dicha pregunta estaba mal formulada, porque las tres fracciones eran diferentes entre sí. Recursos Humanos certificó por escrito que yo como profesor estaba equivocado porque la respuesta correcta es 3/9 por ser simplificable.

2.       Recursos Humanos de la UP, resolvió en el tablero los siguientes problemas matemáticos así: 11+7/3=18/3=6. Yo volví a llamar la atención a Recursos Humanos por el esperpento que acababa de hacer, y lo que me respondieron fue que si quería me saliera del salón y esperara que los demás evaluandos hicieran el examen.

3.       Recursos humanos de la UP, resolvió en el tablero: 3+4*2=7*2=14. Allí me convencí que mi evaluadora era una pobre analfabeta, porque en la pregunta 1, las tres fracciones son diferentes entre sí, en la 2 se resuelve así: 11/1+7/3=33/3+7/3=40/3 y en la 3 se resuelve así: 3+4*2=3+8=11

En vista de que el examen era una gran vergüenza y daba hasta asco pensar en que en la UP ocurriera eso, yo denuncié al Consejo Académico dichos esperpentos. Pero los miembros del Consejo Académico,  como títeres de Gustavo y con la misma inteligencia que las evaluadoras, enviaron mi queja a la Asesoría Jurídica para que dictaminara si yo era el equivocado o era Recursos Humanos. Cuán grande sería mi sorpresa que después de haber enseñado matemática y física durante más de 35 años, con estudios de licenciatura en Matemática y Física, Especialización en Física y Maestría en Física en la Universidad Nacional de Colombia, el Consejo Académico de la UP le dio la razón a los analfabetas. En el despacho del profesor Eduardo Flores reposan todas las pruebas, y mientras la actual administración no se pronuncie sobre este caso, seguirá valiendo lo del Consejo Académico, en donde certifican que yo soy el equivocado, y por lo tanto, estarán respaldando también los esperpentos de Gustavo García de Paredes.

Como Gustavo García de Paredes era feliz persiguiendo a los profesores que se identificaban con Flores, auspició a un grupo de profesores en el Departamento de Física para que colocaran un demanda de plagio falsa en mi contra, en reunión de profesores de física, sin presentar escrito original, sin presentar plagio y sin la presencia del supuesto escritor,(el profesor Flores conoce el caso, y en su despacho están las pruebas).

Después que un abogado le hizo conocer al Decano Carlos Ramos que plagio es usar lo de otro como si fuera de uno sin decir clara y detalladamente de donde extrajo la información, el grupo de profesores se asustaron porque se les vino a la mente la idea de una demanda de plagio falsa y mal intencionada, y enviaron con urgencia un correo al supuesto escritor para que se presentara a confirmar la demanda y colocarla en la fiscalía. La Comisión Disciplinaria de la Facultad dictaminó que no había plagio, y el juzgado tercero de lo penal dictó sobreseimiento. A pesar de todo esto, Gustavo García de Paredes me expulso de la UP, y si la nueva administración no elimina esas injusticias, no estamos renovando sino avalando las injusticias de la pasada administración.  
Yo he visto gobiernos pedir perdón por injusticias o crímenes cometidos por sus conciudadanos, y al Vaticano condenar la pedofilia, la homosexualidad, la prostitución  y hacer lo mismo por curas pedófilos que sancionan retirándolo del sistema